En 1958 Emilio escribió su primer poema, un romántico compendio de palabras y sentimientos que a continuación compartimos con vosotros.
Cuando te encuentres triste
y del mundo
te alejes un instante,
eleva tus ojos al cielo
y recuerda
que en la tierra
tienes un amante,
que prendado
de tus ojos bellos,
de tu figura indomable,
silencioso reza al cielo,
para que tú,
también le ames.